¡Ya estamos a martes! un día menos para el finde!! Y como cada martes hoy traigo una receta de las que me gustan.
Permitidme salirme un poco de las recetas sanas y naturales, porque hoy traigo una receta para toda la familia. Puede que no sea una receta "light" ni baja en calorías, pero os aseguro que por ser casera y con ingredientes naturales ya se gana tanto en salud como en calorías. Además un pizza si está hecha a mano, sin aditivos, y con elementos naturales puede ser una buena opción para una comida o cena en familia o con amigos.
La receta que hoy traigo es para una pizza grande, que ocupe toda la bandeja del horno. Pero pensad que las medidas siempre las hacéis vosotros. Ya que tenéis dos opciones: O ponéis menos cantidad de cada producto, pero equivalente para que salga todo bien o, lo que hace mucha gente, hace toda esta masa y la divide en pequeñas porciones para poder guardar y tener para diferentes días.
Como mi marido es un glotón. Esta masa me da para una mega pizza para él y un trocito para mi. La divido mentalmente, cuando la tengo en la bandeja y yo me quedo con un tercio, y él con el resto, os podéis imaginar...
Si tenéis peques esta receta es estupenda por varias razones. La primera es que pueden ayudar, poniendo y pesando los alimentos. Si tenéis máquina amasadora como yo, pueden ser los que echen los ingredientes en el bol. También pueden ayudar con el rodillo y por último, pueden poner los ingredientes y disfrutar de esta deliciosa comida cuando salga del horno :)
Aquí tenéis la receta:
INGREDIENTES:
- 500 gr de harina de fuerza
- 1cdta de sal
- Dos sobres de levadura de panadero (cada sobre contiene 4,6 gr. Yo utilizo la marca vahiné que puedes encontrar en casi cualquier supermercado)
- 2 ccdas de AOVE
- 300 ml de agua tibia (aproximadamente)
Yo tengo la suerte de que estas navidades me regalaron una máquina amasadora, que es un portento y es que estoy encantada con mi Kenwood Kmix de color amarillo (la podéis ver en la foto con el gancho). Pero también se puede hacer con panificadora, con termomix, y por supuesto a mano (prepara los brazos y dale salero al cuerpo amasando).
Con la amasadora:
Echas en el bol la harina, sal y levadura. Lo remueves tu mismo con una pala de madera un poco. Después se pone el gancho en la amasadora. Yo la pongo a velocidad 2 y añado, poco a poco, las dos cucharadas de aceite y dejas que amase un poco, para que el aceite impregne los ingredientes.
Después se añade el agua, poco a poco. Y es que este paso es importante hacerlo así, porque tienes que ver cuando la masa necesita más agua. Hay que tener mucho cuidado, porque si echas más agua de la necesaria tendrás que añadir más harina y como no sepas parar, irás añadiendo cada cosa y no te saldrá bien. Yo suelo utilizar los 300 ml, pero los voy poniendo poco a poco con la jarra, mientras la máquina amasa. En el momento en que veo que la masa está elástica dejo de echar agua. Es rápido notar si necesita más agua, pero lo dicho, NO OS PASÉIS, haciéndolo despacio os saldrá a la perfección.
Después de poner todos los ingredientes. Suelo subir la velocidad de amasado hasta el 4. Lo dejo unos pocos minutos a esa velocidad. Cuando veo que la masa está totalmente enganchada al gancho, paro la máquina, me enharino las manos un poco (solo las yemas de los dedos para que no se pegue la masa) y saco la masa del gancho. Después la dejo caer en el bol. Y vuelvo a encender la máquina. Y dos minutos más hago: velocidad 2, velocidad 4, velocidad 6. Acabando con la máxima velocidad.
Si lo haces a mano te recomiendo: Pon los ingredientes secos en un bol. Haz un volcán y pon el aceite y amasa un poco, pon el agua poco a poco y ve amasando. Lo mejor es hacerlo en el bol, para que no se desparrame todo y tengamos que volver a empezar. Cuando la masa ya tenga algo más de consistencia, aunque se nos pegue a las manos, puedes pasarla a una superficie plana y limpia, como el mármol de tu encimera y empezar a amasar bien. Son unos 7-10 minutos amasando para que quede una masa elástica y totalmente perfecta.
Cuando hemos acabado de amasar, ponemos nuestra bola en un bol (yo normalmente le pongo un poco de harina al bol para que la masa no se quede pegada cuando la saque). Lo tapamos con film transparente (si tienes un gorro de ducha de esos que te da la Renfe cuando viajas de noche, te recomiendo que lo utilices, ya que puede servirte para varias recetas antes de deshecharlo y no utilizas el film transparente tantas veces (el medio ambiente te lo agradecerá)).
Debes dejarlo un mínimo de dos horas en un lugar cálido de tu casa (ya que no tiene porque ser la cocina).
Yo normalmente lo dejo en el mármol de la cocina, más que nada porque seguramente me pondré a cocinar y con el calorcito del horno o de los fogones, mi cocina se calienta y es perfecta para que leude la masa, pero si tienes un radiador cerca o una habitación que sea especialmente caliente, te recomiendo que dejes allí el bol con la masa.
Digo como mínimo dos horas, porque también puedes hacer la masa por la mañana y dejarla todo el día para luego amasarla por la noche y tener una cena estupenda.
Cuando ha pasado el tiempo prudencial y ves que tu masa ya ha crecido, enharinas una superficie limpia, sacas la masa del bol, la pones en esa superficie y es momento de amasarla un poco con las manos, más que nada para que se le vaya el aire que tenga dentro. Después tienes dos opciones, o la cortas en porciones más pequeñas (las puedes envolver y guardar en el congelador) o es el momento del rodillo.
Para ello, simplemente con un rodillo de madera (yo le pongo un pelín de harina al rodillo y no a la masa, para que no se pegue) y la extiendes.
Debes tener cuidado al extenderla, porque a veces, si no te das cuenta y se queda sin harina por debajo se te pega a la superficie donde la tengas. Así que lo que yo hago es: paso el rodillo unas dos o tres veces por cada lado. Después le doy la vuelta a la masa, con cuidado para que no se rompa. En el momento de darle la vuelta miro si hay harina, si no veo, pongo un poco (es mejor poner poco a poco que demasiada, porque se pega a la masa y luego tienes masa con harina). Cuando tienes la masa bien extendida. Pones papel de hornear en la bandeja y la masa encima.
Por último: Solo pones los ingredientes que más te gusten.
Nosotros las hicimos así:
INGREDIENTES:
- Tomate natural triturado
- Taco de queso curado (en triángulos)
- Chorizo pamplonica
- Ventresca de atún
- Aceitunas negras
Lo primero que hice fue hacer el tomate natural. Normalmente lo echábamos tal cual en la pizza y así se hacía en el horno, pero el problema es que el agua hacía que la masa se mojara demasiado y muchas veces se rompía. Así que esta vez lo que hicimos fue: poner el tomate natural triturado en la sartén, un poquito de sal (cucharilla de café) y un poquito de azúcar (cucharilla de café) y reducirlo hasta que el agua desaparezca y solo quede un concentrado de tomate, exquisito (este es el tomate que utilizamos cuando hacemos arroz a la cubana).
Después extiendo el tomate por la masa. Corto el taco de queso curado en trozos y lo reparto por la superficie. Es el momento de saber qué trozo será para cada uno. Esta vez para diferenciarlos. A mi lado le puse unas olivas negras.
Como véis en la última foto, mi trocito es más pequeño, porque una cosa es pasarse y otra comerse una pizza entera |
Después la metimos en el horno. A 150-170 grados (depende de cada horno y su potencia) con calor arriba y abajo, unos 10-15 minutos, o hasta que veas los bordes de la pizza como se ponen de un color marrón clarito muy bonito.
Mientras yo esperaba a que la pizza se hiciera en el horno, mi marido que no es de comida natural y le encanta la grasa y todo aquello que yo no puedo comer: Cogió la sartén y puso el chorizo un poquito, para freirlo.
Aquí veis la masa y esa esponjosidad de la que os hablo. A que está para hincarle el diente? |
Cuando sacamos la pizza él se puso su chorizo por encima y yo me puse la ventresca de atún. Y listo para comer.
Debo decir que de mi trozo solo me comí la mitad, y la otra la dejé para el día siguiente y lo hice por una simple razón y es que la masa es tan esponjosa y con tanta miga, que llena enseguida. Tienes que saber cuando parar, porque si no, no pararás hasta terminarla, porque es un verdadero vicio.
Hasta Carlota se comió un trocito de mi pizza y es que cuando la vio puso los ojos como platos!
Así que no tienes excusa, si no has hecho masa de pizza. ¿A qué esperas? Seguro que los peques de la casa te lo agradecerán una y mil veces :) :)
La semana que viene más y mejor :)
Y vosotros: ¿Hacéis pizza en casa? ¿Os ayudan los peques? ¿De que la rellenáis?
A la izquierda la pizza con chorizo y a la derecha la pizza con ventresca. A que tienen buena pinta? |
Yo no soy de hacer pizzas caseras aunque me encanta comerlas así que con tu permiso, le paso la receta a mi madre, que a ella sí que le encanta hacer estas cosas...
ResponderEliminarPintaza!!!
Un besito!!!
Pues ya me dirás si la hace tu madre, qué tal queda!! :) :) :)
EliminarMUAS!
Nos encanta la pizza!!!! Y a mis hijos prepararlas! probaremos tu receta!
ResponderEliminarYa me contarás qué tal!!! :) :) La verdad es que da para una buena pizza, jejejeje. Y es que los peques se divierten ayudando :)
EliminarMUAS!
Se ve muy rica !! Hacemos pizza en casa casi todos los viernes :), suelo dejarla un poco más fina al extenderla porque como dices sino con un pedazo te llenas jeje
ResponderEliminarPor cierto un día tratare con harina de fuerza suelo hacerla con harina regular
Un abrazo
Yo la dejo super fina cuando la extiendo, tanto es así que esta última vez se me rompía por los lados. Y es que creo que todo esto es por que le pongo masa de fuerza.
EliminarYa me contarás si lo pruebas.
MUAS!
Tiene m uy buena pinta!! Nosotros en casa si que hacemos y a veces si vienen amiguitos a pasar el día a casa les preparo la masa y luego los niños pasan el rodillo y ponen los ingredientes. En tu receta he visto que le echas aceite a la masa, eso no lo sabía ves a la próxima ya lo sé!! Abrazos
ResponderEliminarY es que es una cena para los amiguetes muy socorrida y es que a todo el mundo le gusta. Y a los peques eso de ayudar y ponerse pringosos les encanta!! jajajaja
EliminarSí, así me enseñaron a mi, agua, levadura, harina y aceite. Incluso te digo que lo bueno de ponerle aceite es que luego si no quieres que se te pegue la masa al bol en la que esté leudando, en vez de harina, también le puedes poner aceite, y es que no se pega y sale a la perfección :) :)
MUAS!